viernes, 10 de junio de 2011

COMENTARIOS DE LECTORES




Dado que al link de D. Mariano Espina Rawson , se lo considera de “interés genealógico” sobre la descendencia de Don Amán Rawson”, me veo obligada a corregir conceptos sobre la “psicología” o “rasgos fisonómicos” aplicados a la genealogía  y que no tienen nada que ver , para  encontrar y reconocer a individuos, que se incluyen como “válidos”.
Como dice D. Diego J. Herrera Vegas , "me gusta llegar al hueso en las investigaciones”.

 Partiendo del último párrafo del link  de Espina Rawson, que dice: “Por último una convicción que se ha formado calladamente en mi conciencia: ¿Cuál es el origen de nuestras certezas genealógicas? Creo que comienza en forma intrauterina, como una gnosisosmogenética.

Ahora por qué hicieron esas afirmaciones escapa del campo genealógico y se traslada al de la “psicología.”

Dice el diccionario de la Real Lengua española que genealogía deriva de la misma palabra del latín y de la palabra compuesta griega que la explicita como “tratado de la generación”, para agregar luego “serie de progenitores y ascendientes de cada persona” y el escrito que la contiene (documentación probatoria). Es decir que la psicología es otra disciplina que en nada tiene que ver con la genealogía. Pretender otra cosa es traspolar conocimientos sin ninguna rigurosidad científica.
La explicación óntico, gnoseo osmótica es perfectamente ubicable dentro de un delirio fantástico parafrénico o alguna otra construcción delirante o ignorante .

Pero, sería bueno explicar algo previamente. El aparato psíquico, es decir aquello que hace de nosotros algo diferente a cualquier otro animal de la escala zoológica, es una construcción  que se logra luego del nacimiento. A ésta construcción concurren los factores genéticos, en su raíz biológica, los deseos de los padres en sus aspiraciones a concretar con el niño, y el vivenciar infantil, es decir el atravesamiento de las experiencias vividas en vinculación con sus diferentes etapas evolutivas. Nada de esto es intuitivo.

El bebé no distingue brazos, lo único que le refiere el cuerpo de la madre es el ritmo cardíaco, que dado los nueve meses que permaneció en el antro materno es un sonido habitual.

Otro tema a diferenciar es entender que función materna o función paterna no son siempre asimilables a las palabras papá o mamá, sino que esas funciones las puede cumplir cualquiera que responda a las necesidades básicas del bebé sin que ello implique obligación imperiosa de ser el progenitor.

En psicología, dado que este es el campo en el cual incursiona el autor, no existen certezas irreductibles, propias de las formaciones delirantes. Por este característica dice el autor que no hay “prueba en contrario” y/o que “aunque se contradiga no será conmovido”

Respecto a las adopciones el tema es mucho mas profundo que la liviandad que las presenta el autor, porque de lo que se trata es un derecho, ni mas ni menos que el derecho a la identidad. Este punto no involucra solamente al adoptado, sino a la toda sociedad, la cual no puede funcionar con ocultamientos, mentiras o desapariciones.

Si solamente se tratara de intuiciones, no habrían aún casi cuatrocientos niños que no recuperaron su identidad, pues espontáneamente se hubieran dado cuenta de la usurpación y reclamado sus derechos violados.

Otro grosero error que presenta el escrito es el párrafo de los nacidos “in vitro”  No existe esta denominación porque en todo caso sería una fecundación “en vitro”, dado que los nacimientos son todos de útero.

Creo que es imposible sostener seriamente que las intuiciones pueden reemplazar a los documentos que concatenan una saga familiar, porque esas intuiciones muchas veces pueden ser de corte “interesado o tendencioso”.

Otro dato poco serio es sostener que a toda la supuesta descendencia del General Belgrano, poniéndole un sombrero y colocándole un sable, estaríamos frente a la viva imagen del prócer, ignorando todas las leyes de la herencia genética. No se trata de parecidos, hay que ser un poco mas serios e ir a las bases de las cosas, no a deseos personales.

Debemos distinguir el oro del cobre y diferenciar lo verdadero de lo verosímil.
Prof. Dra. María Carlota Piaggio Picas. Lic. en Psicología, Dra. en Psicología Social


Debo volver sobre este blog público de D. Mariano Espina Rawson, que fuera mencionado de "interés genealógico" porque es muy importante de comentar esta frase:

"Por último una convicción que se ha formado calladamente en mi conciencia: ¿Cuál es el origen de nuestras certezas genealógicas?"

No se debe tener dudas sobre nuestra genealogía, en tanto y en cuanto haya documentos probatorios de la misma (papeles), como actas de nacimiento, matrimonio, defunciones, testamentos, actas notariales etc. que sirvan para armar la cadena de individuos relacionados entre si.

La "certeza " en genealogía son solamente los documentos, ni tampoco libros de personas que publiquen arboles genealógicos que pueden ser de una gran ayuda, en tanto y en cuanto nos den las fuentes documentales de cada individuo que incluyen, para nosotros obtener el documento.

El primer libro americano de genealogía,"La Ovandina" del año 1621, del cual muchos tomamos como referencia, tiene muchos errores.

En la búsqueda de uno de mis ancestros, tomando la referencia de una citación de dos importantes genealogistas (argentino y paraguayo)de la misma, reitero: citación y no afirmación, al solicitar a la fuente legal española el acta probatoria, comprobé que no era correcto la información de La Ovandina.

En el mismo blog, se habla como posible prueba hacer los ADN para demostrar la descendencia de Amán Rawson, este estudio no hace a la genealogía, hace a una identidad biológica , que luego de comprobar la misma, hay pasos legales a cumplir , siendo el último, la otorgación de un acta de nacimiento por autoridad competente.

Prof. Dra. María Carlota Piaggio Picas.


REFLEXIONES que hago sobre el comentario que le mereció mi trabajo publicado en el blog, inesperadamente, a un alto estrado científico en el campo de la psicología.

Con la filiación de mi bisabuelo se ha abierto una caja de Pandora que vaya a saber cuantas sorpresas tiene todavía para asombrarnos. 

En primer lugar que quede en claro que la intervención de la psicóloga (Profesora Doctora María Carlota Piaggio Picas, licenciada en psicología y Dra. en Psicología Social) no tiene nada que ver con el tema de la filiación de Juan de Dios Rawson que era la cuestión central sobre el que traté en mi artículo publicado en el blog sino sobre unas pocas líneas al final del artículo referidas a “una convicción que se ha formado calladamente en mi conciencia” sobre el tema de nuestras certezas genealógicas.

No se trata entonces de una hipótesis científica y mucho menos de una tesis sino simplemente de una creencia personal sin pretensión alguna de verdad demostrada, creencia que puede ser compartida, criticada parcial o totalmente por el que quiera. Jamás imaginé que merecería ser analizada desde tan alta cátedra. Vayamos ahora a analizar el análisis de la doctora:

Dado que al link de D. Mariano Espina Rawson , se lo considera de interés genealógico sobre la descendencia de Don Amán Rawson, me veo obligada a corregir conceptos sobre la psicología o rasgos fisonómicos aplicados a la genealogía y que no tienen nada que ver, para encontrar y reconocer a individuos, que-se-incluyen-como-válidos.
Que los rasgos fisonómicos no permitan deducir parecidos o parentescos es, al menos para mi, una sorprendente novedad. Todas aquellas voces que hemos escuchado desde siempre como “pero es igualito al padre, o la madre, o al tío fulano, etc.” o “Fíjate fulanita como tiene las mismas manos que la abuela, o los mismos ojos que tío Estanislao”, o “los pies chicos (en varones calzar 37 es verdaderamente bien raro) como todos los Gómez Amuchástegui” o bien en cuchicheo  “este no se parece en nada a Bonifacio ni a nadie de los Pérez Fernández, a quién habrá salido? O “todos los Castellanos Farías son igualitos” todo ello a ha sido un craso error. Me doy por enterado. Ahora me pregunto si llevamos esta lógica al extremo quiere decir que si por la calle me tropiezo con un individuo de color amarillo y ojos rasgados es absolutamente falso y alejado de la realidad que yo deduzca que se trata de un japonés o un chino? Cuando me encuentro con un muchacho que parece igual a su padre tengo que sospechar que en realidad es hijo de otro?  (En el diario “Clarín” (8.6.11), pág. 29, hay un interesante artículo que puede relacionarse con este punto).
Como dice D. Diego J. Herrera Vegas, "me gusta llegar al hueso en las investigaciones".
Non nego, comparto totalmente, si quieren hasta la médula, pero no me parece necesario tanta carnicería. Con llegar al padre y a la madre es suficiente.
Partiendo del último párrafo del link de Espina Rawson, que dice: Por último una convicción que se ha formado calladamente en mi conciencia: ¿Cuál es el origen de nuestras certezas genealógicas? creo que comienza en forma intrauterina,-como-una-gnosisosmogenética. Ahora por qué hicieron esas afirmaciones escapa del campo genealógico y se traslada—al—de-la--psicología.
Dice el diccionario de la Real Lengua española que genealogía deriva de la misma palabra del latín y de la palabra compuesta griega que la explicita como tratado de la generación, para agregar luego  serie de progenitores y ascendientes de cada persona y el escrito que la contiene (documentación probatoria). Es decir que la psicología es otra disciplina que en nada tiene que ver con la genealogía. Pretender otra cosa es traspolar conocimientos sin ninguna rigurosidad--científica. La explicación óntico, gnoseo osmótica es perfectamente ubicable dentro de un delirio fantástico parafrénico o alguna otra construcción delirante o ignorante respecto a.
La genealogía humana no es ni angélica ni animal cuyos respectivos psiquismos, si los tienen, los ignoramos completamente. Ahora el psiquismo forma parte de la naturaleza humana. Pretender que no tenga nada que ver con la humana genealogía, que ni siquiera sirva para comprender ciertas actitudes humanas relacionadas con la genealogía es otro motivo de gran sorpresa.
La explicación óntico, gnoseo osmótica es perfectamente ubicable dentro de un delirio fantástico parafrénico o alguna otra construcción delirante o ignorante respecto a.
No contenta con exponer con crueldad y a plena luz del día mi ignorancia la doctora me diagnostica enfermedades terribles y no me recomienda ninguna terapia, ni siquiera una aspirina (no me corrijan por favor, ya se que no se trata de un psicotrópico). Socorro! Alguien que me ayude! Un médico por favor!
Pero, sería bueno explicar algo previamente. El aparato psíquico, es decir aquello que hace de nosotros algo diferente a cualquier otro animal de la escala zoológica, es una construcción que se logra luego del nacimiento.
Obviamente por lo ya dicho concedo la primera parte (somos diferentes a los animales). La segunda (que se logra luego del nacimiento) como no soy doctor en nada la pongo en duda. Me gustaría conocer la opinión de especialistas en el tema que habría que ver si es unánime. Si el especialista fuera miembro de la Academia Pontifica de Ciencias me sentiría mucho más seguro porque como es sabido en estas cosas la ideología grava pesadamente las diferentes posturas.
A ésta construcción concurren los factores genéticos, en su raíz biológica, los deseos de los padres en sus aspiraciones a concretar con el niño, y el vivenciar infantil, es decir el atravesamiento de las experiencias vividas en vinculación con sus diferentes etapas evolutivas. Nada de esto es intuitivo.
Quiere decir esto que el hombre no es capaz de intuiciones? Que la intuición no tiene nada que ver con la formación de nuestras estructuras psicológicas? Es un compartimiento totalmente estanco dentro de nuestras estructuras sin contacto alguno con las demás? No lo sé, estoy preguntando.
El bebé no distingue brazos, lo único que le refiere el cuerpo de la madre es el ritmo cardíaco, que dado los nueve meses que permaneció en el antro materno es un sonido habitual.
-Así será.
Otro tema a diferenciar es entender que función materna o función paterna no son siempre asimilables a las palabras papá o mamá, sino que esas funciones las puede cumplir cualquiera que responda a las necesidades básicas del bebé sin que ello implique-obligación-imperiosa-de-ser-el-progenitor.
Es cierto, pero me parece, la Dra. dirá si estoy equivocado o no, que se inscribe ella entre los partidarios de la teoría del género en la que se sostiene que un papi  y una mami (varón y mujer) son iguales a un papi y una mami ambos varones o ambas mujeres.
En psicología, dado que este es el campo en el cual incursiona el autor, no existen certezas irreductibles, propias de las formaciones delirantes. Por este característica dice el autor que no hay prueba en contrario-y/o-que-aunque-se-contradiga-no-será- conmovido.
Es mi opinión podría no ser así. Tantas teorías psicológicas han pasado de moda y ya nadie se acuerda de ellas. Me acuerdo de amigos míos psicólogos (de fina vestimenta inglesa sport, la mayoría con barba prolijamente recortada y una pipa fumeante repartiendo fragancias) que hará unos 50 años me contaban haber descubierto que convivir dos o tres parejas, y compartir inclusive el lecho les había resultado una experiencia psicológica importantísima. Como he repetido varias veces en mi artículo no soy psicólogo pero si se que se trata de una ciencia que todavía se encuentra en su infancia, que coexisten varias escuelas diferentes y muchas  irreductibles  entre ellas. 
Respecto a las adopciones el tema es mucho mas profundo que la liviandad que las presenta el autor, porque de lo que se trata es un derecho, ni mas ni menos que el derecho a la identidad. Este punto no involucra solamente al adoptado, sino a la toda sociedad, la cual no puede funcionar con ocultamientos, mentiras o desapariciones.
-Que el tema es mucho más profundo obvio (como dicen los chicos). No he hecho el mínimo intento de tratarlo en profundidad dado que no tengo ninguna competencia para ello. Pero tampoco lo he tratado. Solo me limité a afirmar que “en la actualidad la psicología aconseja no ocultar esta condición al adoptado sino revelarle la verdad lo más pronto posible”. Esto es así o no? Por otra parte nada tengo que ver con secuestros, ocultamientos (salvo en los períodos de persecuciones en nuestra patria haber ocultado a alguien en mi casa), mentiras y desapariciones. Previendo algún futuro análisis de mis dichos, concédanme que hablo de buena fe, aseguro que nada tengo que ver con maniobras de narco dólares ni narcotráfico. 
Si solamente se tratara de intuiciones, no habrían aún casi cuatrocientos niños que no recuperaron su identidad, pues espontáneamente se hubieran dado cuenta de la usurpación y reclamado sus derechos violados.
Muchos de los chicos que recuperaron su identidad revelaron que siempre habían sospechado no ser hijos de—sangre—de—quienes—figuraban—como—siendo—sus--padres. 
Otro grosero error que presenta el escrito es el párrafo de los nacidos in Vitro. No existe esta denominación porque en todo caso sería una fecundación en Vitro, dado que los nacimientos son todos-de-útero.
Concedido. Soy un ignorante total en fertilización asistida. Sin embargo lo que he dicho, sin rigor técnico alguno, lo comprende todo el mundo.
Creo que es imposible sostener seriamente que las intuiciones pueden reemplazar a los documentos que concatenan una saga familiar, porque esas intuiciones muchas veces pueden ser de corte interesado o---tendencioso.
No he dicho que las intuiciones puedan reemplazar a los documentos. He dicho que los documentos pueden venir en apoyo de las intuiciones o bien contradecirlas. No comprendo por otra parte que pueda haber intuiciones tendenciosas o interesadas. En ese caso serían intuiciones?
Otro dato poco serio es sostener que a toda la supuesta descendencia del General Belgrano, poniéndole un sombrero y colocándole un sable, estaríamos frente a la viva imagen del prócer, ignorando todas las leyes de la herencia genética. No se trata de parecidos, hay que ser un poco más serios e ir a las bases de las--cosas,--no—a—deseos--personales.
-Conoce la Dra. a algún descendiente del Gral. Belgrano?
Debemos distinguir el oro del cobre y diferenciar lo verdadero de lo verosímil.
Totalmente-de-acuerdo.
Creía yo no conocer a la Dra. María Carlota Piaggio Picas pero me viene a la memoria una discusión que se origino en una reunión de amigos, donde ella se hallaba presente,  y si bien participo del debate en realidad el mismo no fue con ella sino con su marido, si es que no hay confusión de personas.
El tema a grandes rasgos versó sobre la conquista española y el valor de las civilizaciones indígenas americanas en comparación con la civilización occidental de aquella época representada, aquí en América, por los españoles. Cuando yo discuto lo hago en forma muy acalorada pero mi ardor no va dirigido contra la persona sino contra la idea en cuestión. Aprovecho para pedir disculpas a cualquiera que se haya molestado con este defecto mío cualquiera haya sido la ocasión y el tema en debate. Particularmente con ella la conversación fue amistosa y cálida, noté su entusiasmo por la genealogía que parecía haberla descubierto recientemente. Me dijo que era diez y ocho veces prima del Che Guevara. Yo me quedé pensando una eternidad como alguien puede ser diez y ocho veces primo de otro hasta que el concepto se precisó: era prima décimo octava del Che (así será. No me inmiscuyo en genealogías ajenas a las mías).
En un ultimo agregado la Dra. Piaggio dice "se habla como posible prueba hacer los ADN para demostrar la descendencia de Amán Rawson, este estudio no hace a la genealogía, hace a su identidad biológica, que luego de comprobar la misma ...".
Mi confusión y mi ignorancia llegan a punto de calcinación. Tenemos entonces un padre biológico y otro genealógico. Ayuda por favor!
Mariano Manuel Espina Rawson.  

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